Hace ya cinco años del nacimiento de mi primer hijo, nunca antes fui tan consciente de lo importante que es preparar bien tu suelo pélvico para el parto. Lo importante que es tener una buena recuperación para disfrutar de la maternidad, y la influencia que la salud del suelo pélvico tiene en la autoestima y en la calidad de vida, especialmente cuando tu entorno cambia completamente y comienzas a dormir a intervalos de 3 horas.

La experiencia de mi primer embarazo me hizo vivir en primera persona muchas situaciones que hasta entonces sólo había vivido del otro lado, desde el lado de la profesional, bien en la maternidad de la Clínica Santa Elena, bien en mi trabajo diario como fisioterapeuta. Por ello comencé a especializar mucho más mi formación como fisioterapeuta hacia la fisioterapia del suelo pélvico, donde la Universidad de Manresa y mis compañeras de máster fueron las piezas claves para abrirme a toda una rama de la fisioterapia poco conocida y poco practicada incluso por los propios fisioterapeutas, que tradicionalmente se han ido formando en otras materias dejando esta como un área de acción muy puntual.

Y ahora, después de dos niños vamos a por el tercero: Clínica Fisia. Un lugar donde espero visibilizar las bondades de la fisioterapia del suelo pélvico y ayudar a vencer los tabúes que la rodean, atendiendo a tantas personas que se han resignado a padecer un problema en silencio sin tener por qué. Y el primer paso hacia la normalización es la visibilidad, por ello Clínica Fisia es una clínica integral, un lugar que hace bandera y gala de la fisioterapia del suelo pélvico, pero que no la circunscribe a un reducto especializado sino que la engloba en un centro de atención fisioterapéutica completa.

Gracias a mis compañer@s, a tantos profesionales y a mis profesores de tantos años porque de lo aprendido y de lo experimentado, estoy aquí y puedo iniciar un nuevo proyecto.